EL GÉNESIS LOS MILAGROS Y LAS PROFECÍAS SEGÚN EL ESPIRITISMO

Allan Kardec

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17. De acuerdo con esto, parece evidente que el estado primitivo de fluidez o pastosidad de la Tierra debe haber tenido por causa la acción del calor y no la del agua. Entonces, la Tierra era en su origen una masa incandescente, y como consecuencia de la radiación calórica, ocurrió lo que acontece a toda materia en fusión: poco a poco se fue enfriando y ese enfriamiento comenzó obviamente en la superficie, que se endureció, mientras que el interior permaneció en estado de fluidez. Se puede comparar a la Tierra con un pedazo de carbón, que al salir del horno es todo rojo, mas su superficie se apaga y enfría en contacto con el aire, mientras que, si se lo parte, su interior permanece aún incandescente.